La importancia del estudio geotécnico sobre el terreno sobre el que se ejecuta una obra se vuelve crucial para las aseguradoras. Si bien el código técnico de la edificación lo deja bien claro desde el año 2006 y el EHE’99 desde el año 1999 también lo define como irremediable cuando el hormigón es la base de la construcción, todavía hay muchos promotores que reacios a presentar el estudio geotécnico a los técnicos de las aseguradoras. En algunos casos se deja presentar el geotécnico de la parcela colindante, si el edificio es de similares características al que se pretende asegurar. Sin embargo, todavía hay cliente que se convierten por momentos en arquitectos y juran y perjuran que su edificación no se cae, que lleva muchos años en pié y que resiste vientos y tempestades. Perfecto, ningún problema, pero las compañías de seguros tienen a su vez firmados unos contratos con reaseguradoras extranjeras y en dichos contratos se exige determinada documentación que tienen que presentar el promotor para poder asegurar la vivienda. Y el estudio geotécnico es uno de los documentos que hay que presentar. Estemos o no seguros de que la vivienda no se va a caer, es imperativo de la aseguradora que no “imperativo de ley”.
Llevo semanas recibiendo la llamada de algún cliente que necesita el seguro decenal e intenta convencerme de que le hagamos el seguro sin estudio geotécnico. Me llama a distintas horas del día insistiendo para ver si, en una de esas, me convence. Le cobran 3.000 euros por la realización de un estudio geotécnico de una vivienda construida a principios de siglo y de la que va a hacer una división horizontal y resulta que le exigen que presente un seguro decenal.
Tiene miedo de que el estudio geotécnico desprenda la mala calidad del suelo donde está construido el edificio y que le digamos que no se puede asegurar, y que si no le ponemos por escrito que le vamos a realizar el seguro decenal si o si, que no se gasta 3000 euros en el estudio geotécnico. Precisamente le está dando a la aseguradora razones de peso para exigir que se haga el estudio geotécnico porque ni él mismo está seguro de que el terreno sea el idóneo.
Total, que espero que me llame la semana que viene y vuelva a intentar convencerme de que le hagamos el seguro decenal sin estudio geotécnico, a lo que yo le contestaré lo mismo que le he venido diciendo durante las dos últimas semanas: el estudio geotécnico es una condición indispensable que ponen todas las aseguradoras para poder realizar el seguro decenal. En definitiva, que me encuentro como Sísifo en el infierno, subiendo eternamente un gigantesco peñasco a la cima de una colina y justo cuando voy a llegar, se me cae rodando por la ladera y vuelta a empezar. Semana si, semana también.

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